El 10 de octubre, se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental (DMSM) con el objetivo de visibilizar a todas las personas con un trastorno psicosocial, así como la labor fundamental que se realiza desde las entidades del tercer sector en el proceso de apoyo y recuperación de este colectivo y su entorno. La Federación Salud Mental Castilla y León, que aglutina a 11 asociaciones locales y 21 delegaciones rurales, centra su objetivo,en esta ocasión, en el entorno laboral y la importante incidencia de las condiciones laborales en el desarrollo de afecciones de salud mental.
Siguiendo la línea marcada desde la Confederación SALUD MENTAL ESPAÑA, el lema de este año es ‘Trabajo y Salud Mental. Un vínculo fundamental’. Como en años anteriores, la temática que enmarca esta conmemoración toma como referencia la línea indicada a nivel internacional por la Federación Mundial para la Salud Mental (WFMH).
“Sabemos, y así lo atestiguan diferentes estudios e informes, que la precariedad laboral es un determinante social dañino para la salud, y que puede generar muy diversos problemas de salud mental como son, entre otros, ansiedad y depresión que a su vez generan un gran sufrimiento psíquico y cuyos efectos se extienden a todos los ámbitos vitales”, explica Ángel Lozano, gerente de la Federación Salud Mental Castilla y León.
Según el Informe ‘Precariedad laboral y salud mental’ elaborado por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, en 2023, más de la mitad de los empleos en España eran precarios. “Bajos salarios, temporalidad, falta de conciliación, elevados ritmos o sobrecarga de trabajo, acoso laboral, brecha salarial, son algunas de las formas que puede adoptar esa precariedad y que terminan por enfermar no sólo el individuo sino a la sociedad”, añade Lozano.
La realidad es que, en España, los problemas de salud mental constituyen la segunda causa de baja laboral, según los datos del INE. “En 2023 se registraron casi 600.000 bajas, un 15,8% más que en el año anterior, lo que nos indica que a pesar de que un amplio porcentaje de empresa considera que sí se preocupa por el bienestar psíquico de sus empleados y empleadas, lo cierto es que o las medidas tomadas no son efectivas, o no es real que se cuide la salud mental en la empresa”, comenta Ángel Lozano.
Respecto a los efectos que se enumeran como más frecuentes en las personas que están expuestas a estos riesgos psicosociales se encuentran el estrés, la ansiedad, la depresión, diversos trastornos psicosomáticos (por ejemplo insomnio), trastornos cardiovasculares, úlceras de estómago, trastornos inmunitarios, contracturas musculares, alteraciones hormonales y/o cefaleas, entre otros.
“Es muy indicativo que según la última Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo, 32 millones de personas cambiarían su puesto de trabajo si tuvieran esa posibilidad, y que cerca de 1,2 millones manifieste molestias relacionadas con factores psicosociales”, destacan desde la Federación.
Por estos motivos, desde el movimiento asociativo Salud Mental Castilla y León apelan a la “responsabilidad del tejido empresarial a la hora de garantizar la salud, no sólo física sino psicoemocional, de las plantillas con la puesta en práctica de medidas efectivas, tales como sistemas de apoyo y adaptaciones, medidas contra la precariedad, mayor control de esos riesgos laborales, generar entornos seguros y saludables donde hablar sin prejuicios de la salud mental, facilitar la compatibilidad de la vida personal y laboral, planificar y gestionar los tiempos más eficientemente y, por supuesto, garantizar el respeto y trato justo a las personas”, enumera Lozano.
Soria se inunda de salud mental
Como cada año, el movimiento asociativo celebra en este día 10 de octubre el Día Mundial de la Salud Mental, que en esta ocasión ha reunido a más de 600 personas en la ciudad de Soria, quienes han recorrido en una marcha reivindicativa las principales calles de la capital. ”Además de tener la oportunidad de reunir a una parte representativa de todas las personas que forman parte del movimiento asociativo, quienes reciben los apoyos y recursos de nuestras asociaciones, con esta marcha tratamos de hacernos visibles a través de nuestra presencia y los lemas que nos acompañan para recordar que la salud mental en un asunto que debe implicar a toda la sociedad”, afirma Elena Briongos.
El movimiento asociativo ha sido recibido, en el Palacio de la Audiencia, por la concejala de Acción Social del Ayuntamiento soriano, Ana Romero, junto a la diputada provincial de Servicios Sociales, Laura Prieto; el subdelegado del Gobierno, Miguel Latorre; y la delegada territorial de la Junta de Castilla y León, Yolanda de Gregorio.
Juan Luis Antón, presidente de Salud Mental Soria Asovica, ha dado la bienvenida a las personas asistentes desde distintas provincias de Castilla y Léon. “Hoy reivindicamos la importancia del trabajo digno como un factor intrínsecamente vinculado a la salud mental, que posibilita y promueve la recuperación de las personas con problemas de salud mental. Desde nuestra entidad, siempre hemos estado comprometidos con esta premisa, gracias a nuestros dos centros especiales de empleo que dan trabajo a 62 personas con problemas de salud mental y discapacidad. Creemos importante seguir unidos hacia un objetivo común, como lo es mejorar la calidad de vida de personas con problemas de salud mental y la de sus familias, así como la defensa de sus derechos”, añadió.
Posteriormente, se ha procedido a la lectura del manifiesto por parte de algunos representantes del Comité Pro Salud Mental en Primera Persona y, tras la conclusión del acto central, el movimiento asociativo se ha trasladado hasta el Polideportivo San Andrés donde se ha desarrollado la comida conjunta y animación musical, como punto final al acto de conmemoración de este Día Mundial de la Salud Mental.
Movimiento asociativo salud mental
El movimiento asociativo Salud Mentales una red de apoyo y soporte social con presencia en todo el ámbito nacional, con más de 340 asociaciones locales que se ha convertido en un punto fundamental de asesoramiento y apoyo. Durante el pasado ejercicio de 2023, en Castilla y León se ha atendido de forma directa a más de 6.000 personas con problemas de salud mental y cerca de 1.000 familias.